Cuatro poetas cubanas

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[FRAGMENTO. Artículo completo en las páginas 101 a 118 de Hablar de Poesía n° 47]

 

CUATRO POETAS CUBANAS

Yadira Valdés León^[1]

 

Se presentan aquí cuatro poetas cubanas: Soleida Ríos, Damaris Calderón, Nara Mansur y Jamila Medina Ríos. Todas ellas nacidas entre los años 50 y 80 del siglo pasado, todas ellas destacadas voces de la poesía cubana actual. Las cuatro integran una antología intitulada Siete poetas cubanas, que ha preparado una de las poetas antologadas, Nara Mansur, y que será publicada próximamente en la Argentina. Completan la antología las poetas Reina María Rodríguez, Legna Rodríguez Iglesias y Martha Luisa Hernández Cadenas.

            Más allá de la obvia imposibilidad de dar cuenta, a partir de una muestra acotada, de una poesía con una tradición y una actualidad tan ricas como la cubana, algunas líneas directrices pueden destacarse: en primer lugar, el hecho de que parte de la poesía cubana actual y de las últimas décadas se está escribiendo fuera de Cuba. En ese sentido, las poetas de esta antología abarcan todo el arco: desde la vida activa en La Habana de Soleida Ríos, pasando por poetas con un pie dentro y otro fuera de Cuba, como Nara Mansur, hasta la vida ya radicada en el extranjero hace varios años, como es el caso de Damaris Calderón. Más allá de la diversidad de las localizaciones geográficas, otra constante en estas poetas es la aparición de Cuba como tema en sus poemas, ya sea más o menos veladamente. Un último elemento que recorre a estas cuatro poetas no es temático, sino estilístico: la exuberancia, el lujo verbal, como si la desmesura del poema diera cuenta de la intensidad de la sed que las mueve a escribir.       

Poetas internacionalizadas todas ellas, construyen sus familias poéticas, su herencia, hacia los cuatro puntos cardinales, en una estrategia que le ofrece al lector una reformulación de la historia personal pero también de una instancia social y compartida. La incertidumbre las convoca, el deseo de escribir la Historia, de liderar sus propias vidas, de engendrar libros como procesos de investigación y liberación. Ni mansas ni quietas, las poetas cubanas aquí reunidas, representan parte importante de la poesía movilizada, inspirada, revulsiva, de Cuba y su diáspora.

 

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 [FRAGMENTO. Artículo completo en las páginas 101 a 118 de Hablar de Poesía n° 47]