La nada que sí está
[FRAGMENTO. Ensayo completo en las páginas 49 a 52 de Hablar de Poesía n° 42]
LA NADA QUE SÍ ESTÁ
por Alejandro Crotto[1]
Leyendo un poema, de pronto sentimos la intensidad de la vida. Para explicarnos cómo alguien logró juntar unas palabras capaces de provocar eso, hablamos de inspiración: una forma de admitir que no sabemos bien ni qué ni cómo sucede. Por eso escribir poesía es o bien imposible o bien básicamente fácil (más allá de todos los grados posibles de dificultad). Por eso también los talleres universitarios de escritura tienen un límite claro: se puede aprender mucho hablando de poesía, analizando procedimentalmente poemas y ejercitando la escritura, sí, pero más allá de los saberes técnicos básicos es poco lo que se puede avanzar en ese marco hacia el corazón del asunto.
Todo esto viene a cuento de compartir la traducción de dos poemas sobre la inspiración. El primero es del italiano Giacomo Leopardi y fue escrito en 1818, o sea cuando el poeta tenía 20 años. (…)
EL INFINITO
Siempre vuelvo a este monte solitario,
y a estos arbustos, que una buena parte
del horizonte ocultan a mis ojos.
Pero sentándome, admirado, amplísimos
espacios más allá, y sobrehumanos
silencios, y la más perfecta calma
imagino en mi mente, y ya por poco
mi corazón se espanta. Y como el viento
oigo pasar entre las ramas, ese
infinito silencio yo a esta voz
voy comparando, y me llega lo eterno,
las estaciones muertas, y esta, viva,
presente, con sus ruidos. Así en esta
inmensidad se ahoga el pensamiento,
y naufragar me es dulce en este mar.
L ´Infinito // Sempre caro mi fu quest’ermo colle, / E questa siepe, che da tanta parte / Dell’ultimo orizzonte il guardo esclude. / Ma sedendo e mirando, interminati / Spazi di là da quella, e sovrumani / Silenzi, e profondissima quiete / Io nel pensier mi fingo, ove per poco / Il cor non si spaura. E come il vento / Odo stormir tra queste piante, io quello / Infinito silenzio a questa voce / Vo comparando: e mi sovvien l’eterno, / E le morte stagioni, e la presente / E viva, e il suon di lei. Così tra questa / Immensità s’annega il pensier mio: / E il naufragar m’è dolce in questo mare.
(…)
[FRAGMENTO. Ensayo completo en las páginas 49 a 52 de Hablar de Poesía n° 42]
- Alejandro Crotto nació en Buenos Aires en 1978. Publicó los libros de poemas Abejas (2009), Chesterton (2013), Once personas (2015), Francisco -un monólogo dramático (2017) y El Infierno de Dante Alighieri (2020).>>